Aprende junto al escritor y profesor de literatura Juan Pablo Villalobos los mecanismos de la comedia y su papel en contextos como la guerra, el crimen organizado o los genocidios
La risa es, con frecuencia, inoportuna. Reímos involuntariamente, de manera irreprimible, en situaciones dramáticas. ¿Por qué y cómo es posible? En este curso nos preguntaremos cuáles son las estrategias y mecanismos que transforman en comedia situaciones trágicas, como las de la violencia.
¿Qué aprenderás en este curso?
En este curso aprenderás los mecanismos de la comedia, el lugar desde el que el humorista puede y no puede hacer comedia, la construcción del personaje cómico y la función social y psicológica de la risa para enriquecer tus conocimientos como autor y escritor de comedia.
¿A quién va dirigido este curso?
Este curso va dirigido a escritores, guionistas, profesores de literatura, lectores, cómicos, periodistas, tertulianos y moralistas. En definitiva, un curso para todo aquel que quiera enriquecer su perspectiva com escritor de comedia.

Juan Pablo Villalobos
Escritor
Juan Pablo Villalobos (México, 1973) es el autor de seis novelas, entre ellas, Peluquería y letras, No voy a pedirle a nadie que me crea (Premio Herralde 2016) y Fiesta en la madriguera, y del libro de no ficción Yo tuve un sueño. El viaje de los niños centroamericanos a Estados Unidos. Su obra ha sido traducida a veinte idiomas. Desde 2003 vive fuera de México. Actualmente reside en Barcelona, donde imparte talleres literarios y es profesor de escritura y literatura en la Universidad Pompeu Fabra, en la Escuela Superior de Cine y Audiovisual de Cataluña y en la Universidad Autónoma de Barcelona.
Magnífico. Un curso para ver y rever, pensar y repensar.
Gracias a este curso he podido ordenar ideas y reconocer prioridades, darles nombre a intuiciones y ubicarme como humorista de la forma más efectiva, creo que estas nociones de pedagogía de la comedia (y la violencia) son fundamentales en la creación humorística, y nada fáciles de explicar y de entender.
Muchas gracias a Juan Pablo Villalobos.