Es redacción publicitaria todo el contenido de texto que hay en cualquier anuncio. Ya sea en Internet, televisión, prensa escrita, prensa online, radio, podcasts, plataformas de contenidos, banners, folletos, carteles, publicaciones en las redes sociales, newsletters, etc. Incluso lo es el papel escrito a mano de «Busco piso por la zona» que nos dejan en el buzón o el cartel de «Se alquila plaza de parking en la misma finca».

La redacción publicitaria es un tipo de escritura hecha con un objetivo comercial. Es decir, no solo informa sobre el producto, sino que busca persuadir al receptor y moverlo hacia la acción de comprarlo. Es el uso óptimo del lenguaje para promocionar o persuadir. Y para conseguir ese uso óptimo debemos seguir tres elementos básicos que todo texto publicitario debe tener:
La corrección: Un texto publicitario debe ser correcto en la forma y en el fondo, con un uso adecuado de la gramática y la ortografía.
La adaptación: En este caso hablamos de estilo. Cómo el texto se puede adaptar a los diferentes medios, a los diferentes productos y a los diferentes destinatarios. No hablamos de la misma manera a nuestro jefe que con los colegas, por lo tanto, cada contexto y cada público objetivo requiere un estilo diferente.
La eficacia: Una vez tenemos un mensaje correcto y adaptado a un contexto debemos alcanzar el objetivo básico de la redacción publicitaria: la persuasión de la audiencia y que esta se mueva a la acción. Por ello, necesitamos argumentar aportando datos de valor sobre un producto y ser
coherentes en la exposición de los elementos del mensaje mediante la estructura y relevancia de este.
La persona encargada de crear este texto es el redactor publicitario. Llamada también redactor/a, copywriter o sencillamente copy. Así que, si te gusta escribir y quieres tener herramientas para poder crear mejores textos para promocionar y hacer crecer sus proyectos, te puede interesar el curso de copywriting y humor de Jordi Caballé.
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